Aunque no es común hablar del color de las deposiciones, es importante saber que su tonalidad puede ofrecer información valiosa sobre nuestra salud. Al observar heces amarillas, las alarmas pueden encenderse, dando paso a una gran cantidad de incógnitas, como: por qué se producen, cuál es el tratamiento a seguir.
Resulta comprensible la preocupación que puede surgir al notar cambios en la apariencia de las heces o un color amarillento. Y es que su aspecto normal es de tonalidad marrón. Aunque esto puede variar de una persona a otra y algunos cambios de color pueden deberse a la dieta o medicamentos.
No obstante, si existen cambios persistentes en la coloración de las heces, acompañados de otros síntomas, es importante prestar atención y conocer las causas.
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¿Qué significan las heces amarillas?
El color de las heces puede variar de una persona a otra y puede ser influenciado por varios factores, como la dieta, los medicamentos y la salud intestinal. En general, las heces normales tienen un color marrón debido a la presencia de bilirrubina, un pigmento producido por el hígado.
Sin embargo, las heces amarillas pueden indicar ciertas condiciones o problemas en el sistema digestivo.
Causas de las heces amarillas
Es común preguntarse por qué se producen las heces amarillas, y esto podría deberse a diferentes causas. Algunas de las más comunes son:
Malabsorción
La incapacidad del cuerpo para digerir adecuadamente las grasas puede ocasionar heces amarillas. Esto puede suceder debido a condiciones como la enfermedad celíaca, la enfermedad inflamatoria intestinal o la intolerancia a la lactosa.
Infecciones
Algunas infecciones, de origen bacteriano o viral, pueden ser las causantes de alterar el proceso normal de digestión y provocar heces amarillas. Entre las bacterias que comúnmente alteran la coloración de las heces están: Escherichia coli y Giardia lamblia.
Síndromes
Las personas que sufren del Síndrome del intestino irritable pueden experimentar heces de color amarillo, entre otros síntomas como dolor abdominal. Además de cambios en los patrones de evacuación.
Por otra parte, quienes sufren del Síndrome de Gilbert suelen tener algunos periodos en los que sus heces son de color amarillo. Esto se debe a los altos niveles de bilirrubina.
Medicamentos
Existe la posibilidad de que algunos medicamentos, como los antibióticos, pueden afectar la digestión y provocar cambios en el color de las heces.
Trastornos
Las heces amarillentas pueden deberse a algunos trastornos, como alteraciones en los conductos biliares que afectan el flujo de la bilis al intestino.
Por otro lado, patologías crónicas como pancreatitis o cáncer podrían ocasionar que el páncreas no proporcione la cantidad de enzimas necesarias para digerir los alimentos, evitando que las grasas se digieran.
Dieta
Es posible que las deposiciones se tornen de un color amarillento si se consumen alimentos con alto contenido de grasa o colorantes, como por ejemplo: la cúrcuma o la batata.
Estrés
El estado emocional de las personas también puede alterar la coloración de las heces. Siendo frecuentes el estrés y la ansiedad. Así, el cuerpo puede responder acelerando la digestión, causando diarrea y heces amarillas.
Tratamiento de las heces amarillas
El tratamiento de las heces de color amarillo va a depender de la causa. A continuación, se presentan algunas opciones comunes de tratamiento:
- Alimentación: Si la malabsorción de grasas es la causa de las heces amarillas, se puede optar por una dieta baja en grasas y alta en fibra. Además, se debe evitar o reducir el consumo de alimentos que desencadenen los síntomas.
- Medicamentos: En algunos casos, se recetan medicamentos para tratar la causa subyacente de las heces amarillas.
- Tratamiento: Si las heces amarillas son causadas por una infección intestinal, es posible que se receten medicamentos antivirales o antibióticos para combatir la infección y restaurar la función intestinal normal.
- Manejo del estrés: El manejo del estrés puede ser fundamental. Siendo recomendable aplicar técnicas de relajación, terapia cognitivo-conductual o cambios en el estilo de vida para controlar los síntomas.
Es importante destacar que el tratamiento adecuado solo puede ser determinado por un médico después de un diagnóstico preciso. Por lo tanto, si experimentas heces amarillas persistentes o acompañadas de síntomas preocupantes, es crucial buscar atención médica.
